La joven dice sentirse “totalmente expuesta” y aconsejó a otras mujeres no dejarse grabar manteniendo relaciones sexuales.
En redes sociales circula una denuncia hecha por una joven llamada Laura García que dice haber sido víctima de la filtración de videos íntimos en internet por parte de su expareja, caso en que la Policía no habría hecho nada al respecto.
En su relato, la mujer explica que a mediados del año pasado sostuvo una breve relación sentimental con un hombre al que identificó como Jefferson Steven Ramírez Barreto, pero al poco tiempo dejaron de hablar y lo último que supo de él es que había embarazado a su actual novia.
Meses después, aproximadamente en febrero, un compañero de trabajo le compartió el link de un video suyo subido a una página pornográfica y le preguntó si sabía de ese contenido.
“Con esta persona, durante la relación, en varias ocasiones, tres ocasiones, nos grabamos teniendo relaciones sexuales y habíamos acordado eliminar los videos. Se supone que eso debía ser así y para mi sorpresa el video que estaba en la página era uno de esos videos, y no solo era uno, eran tres videos subidos a un canal que este sujeto había creado con mis fotos”, relató la joven.
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García explica que en esa página encontró también fotos que el sujeto le tomó en algún momento en su propia casa y que “esta persona prácticamente se está lucrando” con ese contenido.
La denuncia fue compartida en la red social Instagram, donde acumula cerca de 145.000 reproducciones y cientos de comentarios de usuarios que expresaron su indignación.
Sin embargo, el calvario de la joven no acaba ahí, pues cuenta que, por aparente falta de pruebas, autoridades no actuaron en su caso, pese a haber interpuesto la denuncia “inmediatamente”.
La mujer narra que también denunció los videos por derechos de autor y la página web los eliminó, pero durante el proceso con las autoridades “dijeron que no eran prueba suficiente las capturas de pantalla ni las grabaciones de pantalla, entonces el proceso quedó así. Lastimosamente, la justicia colombiana es pésima”.
Cuando todo parecía haber acabado, Laura cuenta que, para su sorpresa, el pasado sábado una persona que no conoce le escribió por chat para preguntarle si tenía un canal porno, pues había encontrado fotos y videos íntimos suyos en internet.
“Esta persona creó de nuevo el canal, esta vez los videos tienen más vistas, igual tiene mis fotos y tiene más videos con más mujeres. Realmente, me genera muchísimo repudio”, explicó.
Ante la gravedad del caso, la joven narra que tuvo que pedir ayuda a su hermano, subintendente de la Dijin, para tramitar nuevamente la denuncia.
“Ya estamos iniciando el proceso con la Fiscalía, pero como sabemos que la justicia no sirve para mucho, quise hacer la denuncia pública porque este sujeto me parece peligroso”.
Según narra, el hombre “es un doctor, se supone, estudia fisioterapia. Va a estar en contacto con muchas personas, acaba de tener una hija y no me cabe en la cabeza cómo pudo llegar a hacer esto, no sé qué pensar. Espero que me puedan ayudar a compartir este video”.
Así mismo, Laura compartió algunas palabras para evitar más mujeres caigan víctimas de este tipo de crímenes. “El consejo es que se cuiden mucho, tengan mucho cuidado de a quién mandan sus fotos íntimas o con quién se graban. Siento que estoy totalmente expuesta, se siente horrible, no puedo estar tranquila”.
Una vez el contenido se volvió viral en redes sociales, la joven compartió en sus historias de Instagram una fotografía de su expareja y advirtió que cambió su imagen y nombre en redes sociales, lo que confirmaría su actuación.
“Realmente esto no se lo deseo a nadie, no sé cómo puede haber gente tan basura en el mundo, pero está pasando (…) Si esto llega a más chicas que han estado involucradas con esa persona, por favor contáctenme para acelerar el proceso”, concluyó.
