Sin duda, el soberbio trasero de Jada Stevens ha traspasado las fronteras de Snellville, su ciudad natal, para convertirse en Patrimonio de la Humanidad, incluso superando en popularidad a cualquier obra arquitectónica faraónica catalogada como tal por la Unesco.
Por Nergal
En una de sus canciones, Roberto Iniesta, a través de su lírica siempre brillante y certera, proclama: «Sin patrias ni banderas, ahora vivo a mi manera; y es que me siento extranjero fuera de tus agujeros. Miente el carné de identidad: tu culo es mi localidad». Lejos de trozos de tela de colores al viento, de nacionalismos y del chovinismo barato de algunos, esta letra es perfectamente aplicable a lo que han sentido muchos de los amantes del género respecto a las extraordinarias posaderas de la «buttwoman» más carismática de la última década. Recordemos algunas de sus filmaciones.